La realidad de la vida es que el amor no dura mucho. Sin embargo, un grupo de neuroquímicos de la Universidad de Stony Brook, Nueva York, lograron encontrar evidencia de que sí, el amor eterno es posible, existe. Los científicos midieron las reacciones cerebrales de un grupo de voluntarios y así lo afirmaba.
Por otro lado la psicología afirma que tenemos que cambiar el chip
ya que el amor no es incondicional y no dura para siempre. Tiene fecha de caducidad y, de hecho, nos movemos por emociones momentáneas más de lo que nos gustaría admitir. Quien enuncia estas palabras es catedrática de Psicología, una investigadora que ha pasado las dos últimas décadas analizando cómo reaccionamos ante las emociones positivas.
¿Con cuál de las dos nos quedamos?
Desde mi punto de vista estos tipos de estudios científicos suelen estar determinados por un factor que el autor o autora no parece ver y es obvio: su propia experiencia de relación de pareja o la de sus personas más allegadas.
O sea, que no le hables de amor eterno a alguien que acaba de sufrir un desengaño amoroso porque se puede reír de ti en tus narices y con razón.
Yo ni investigo, ni hago experimentos de este tipo,..simplemente analizo la realidad y el día a día de la gente que me rodea y en tan solo unos meses he observado que son muchas las parejas de conocidos, amigos, familiares... que se han ido al traste, con hijos pequeños, mayores o sin ellos; da igual. Esto me ha hecho no solo inspirarme en este artículo sino plantearme algo y literalmente lo escribo:"!¿QUÉ COÑO ESTÁ PASANDO?!"
Según nuestros mayores esto antes no pasaba tanto como ahora y "el internet" ,dicen ellos, tiene mucha culpa. Llevan parte de razón, todo está más fácil que hace unos años y quizás nos aguantemos menos. Ni lo de antes, porque se aguantaba demasiado sobretodo la mujer, ni tampoco lo de ahora. Creo que estando enamorado y teniendo muy claras las cosas la tentación queda lejana. .
Internet, redes sociales, ...son como el fuego diría yo; un gran y provechoso invento siempre que les demos buen uso.
Cuántas veces hemos oído "es que conoció un@ por Internet y ...", si tu relación va bien esto no ocurre, un@ busca fuera lo que no tiene en casa, ¿no? o busca algo más porque no se conforma con lo que tiene. A veces pensamos que lo nuestro va viento en popa y no es así, entrando en una monotonía diaria a la cual te acostumbras pero a la vez te das cuenta que falta algo y que no eres feliz. Incluso se llega a acostumbrar a vivir de aquella manera, a malvivir, por los hijos o por cualquier otro asunto y no se da el paso de dejar la relación. Me parece un gran error, pues a veces se llega a una situación en la cual el ambiente no es nada bueno para esos hijos, ni para uno mismo.
Yo de vez en cuando digo a mi marido de cachondeo pero en serio, que si encuentra a otra no me maree , ni me engañe, ni lo oculte, sino que lo diga claramente y adiós muy buenas. Eso de "necesito un tiempo, me lo tengo que pensar,..." no me convence nada, la adolescencia ya pasó y hace mucho. Somos adultos y, si se acaba el amor o hay dudas y el otro se niega a seguir conviviendo en pareja, pues hay que respetarlo por mucho que duela, eso sí, antes habiendo intentado todo por salvar esa situación o relación. .Supongo que se pasará muy mal, sobretodo la parte dejada, pero todo pasa por muy duro que suene. Es muy fácil hablar así cuando a ti no te ha ocurrido, lo sé.
Toda relación sufre sus altibajos, y en esos momentos lo vemos todo negro y olvidamos lo bueno, pero son "momentos" y cuando pasan te dices "vaya tontería, por esto me puse yo así?" Si hay amor entre los dos seguirán tirando del carro, aprendiendo de esos errores cometidos y perdonando al otro. Pero cuidado, desde mi punto de vista hay cosas imperdonables, como una infidelidad o un maltrato. Yo nunca perdonaría ninguna de estas dos cosas, porque no podría vivir con ello ni con él, estaría todo el día reprochándoselo.
Yo soy muy perfeccionista y ello también lo plasmo en el terreno amoroso, sé que es un error; porque la perfección no existe en ningún ámbito de la vida.
Es verdad que el día a día hace que vayamos tan aceleradados que podamos llegar a olvidar ciertas cosas. Y nos centramos tanto en los hijos, sobretodo cuando son pequeños, que nos olvidamos de nosotros mismos y del otro en ciertos aspectos. Para mantener viva la llamita hay que trabajarla a diario los dos, el beso de la llegada a casa, un te quiero sin venir a cuento, una salida los dos solos para hablar de nosotros..., por ejemplo.
Yo sí creo en el amor eterno ,si no qué... lo nuestro no tendría sentido y todos esos proyectos y planes de futuro que tenemos son porque pensamos envejecer juntos. Pienso y hablo así porque nos va bien, pero el futuro es impredecible y esto no quita que mañana él o yo nos podamos cansar y mandemos todo al garete, pero también creo que eso no puede ocurrir de la noche a la mañana y que necesita un proceso de desgaste de la relación, con lo cual no nos pillaría de susto a ninguno de los dos, aunque hay veces que el amor es tan ciego que nos negamos a ver lo evidente.
Me encanta cuando voy por la calle y veo a dos viejecitos cogidos de la mano o dándose un besico, entre otras cosas pienso que me gustaría llegar a ello; igual que están llegando mis padres.
No pretendo haceros creer que lo mío es un camino de rosas, ni mucho menos, también tropezamos de vez en cuando y nos caemos; pero ahí está la clave, en el saber levantarnos juntos del suelo , seguir hacia adelante y corregir aquello que hicimos mal para que no vuelva a ocurrir, aunque ocurrirá otra cosa porque somos diferentes y no somos perfectos.
Y quien diga que no discute con su pareja es porque miente o porque esa relación no va nada bien. Bueno, tampoco irá bien una relación en la cual se pasan el día regañando, eso es otro asunto.
Cada vez tengo más claro que la comunicación es primordial para que una relación funcione bien y no me refiero a hablar como un loro, sino a expresar lo que sientes o quieres en determinados momentos. Yo soy de mucho hablar y no me gusta acostarme enfadada sin haber hablado antes el asunto; aunque hay veces que me precipito demasiado ya que es mejor hablar cuando ha pasado un poco la tormenta, se ve todo más claro porque los nubarrones ya marcharon, jeje.
También es muy importante saber escuchar al otro, aunque te esté hablando del partido de tenis que vio ayer.
El respeto es otra pieza clave aquí, si se pierde continuamente no hay nada que hacer.
La confianza, cómo no, otra pieza fundamental que se consigue con el paso del tiempo, cuando el otro con sus hechos te ha demostrado que puedes confiar en su persona.
Nunca olvidaré unas palabras que me dijo el cura que nos casó en el momento de la confesión:"habrá días que no lo quieras ni ver, el amor es como las lentejas". Y además de verdad.
Lo hablaba hace unos días con una compañera, a la cual admiro en este tema como en muchos otros ; porque ella y su marido son todo un ejemplo de amor, todo lo hacen juntos y son muchos los años que llevan uno al lado del otro. Ella, con sus historietas, me enseña mucho y se le ve super feliz con su pareja, con la cual lleva más de 30 años.
Coincidíamos las dos en que para mantener muy viva esa llamita hay que programar entre los dos pequeños proyectos: pintar la casa juntos, hacer la compra juntos, preparativos de algún evento familiar, ...son pequeñas cosas que dicen algo muy grande y ella me decía que esas tonterías le hacían muy feliz, eso es porque está enamorada.
Con todo ello quiero decir que cualquier cosica que hagamos con el otro nos va a parecer algo muy grande, por el mero hecho de compartirlo con la persona deseada.
Un momento que a mí también me hace muy feliz es ese ratico en el sofá viendo nuestra serie favorita los dos solos mientras la tropa duerme, en el sofá con la mantica. Tonterías que me encantan.
Entonces, ¿Por qué se acaba esto? monotonía , dejadez, el ritmo acelerado de vida que llevamos (casa, niños, trabajo...), ...
Esto no es un manual de pautas a seguir para que tu relación funcione, no pretendo eso ni estoy capacitada para ello, es simplemente mi modesta opinión con la cual estaréis o no de acuerdo.
¿Tú crees en el amor eterno?
